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El bidé no es una cosa de moda, es un potente aparato sanitario que no sólo aumenta la eficacia de nuestra limpieza, sino que también fortalece tu salud. ¿Qué opciones tienes y cómo elegir un bidé para obtener exactamente lo que necesitas?
 

Para muchos puede ser una sorpresa que haya muchas más opciones de bidé de las que parecen a simple vista. Permítenos presentártelas y mostrarte lo que ofrecen y dónde están sus escollos. Así podrás elegir el producto que mejor se adapte a tus necesidades.

Bidé independiente

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La representación clásica de un bidé es una taza de cerámica independiente, exenta, que también incluye un grifo para bidé con una salida móvil que dirige el flujo de agua a las zonas que se van a lavar. Esta opción requiere un cuarto de baño más grande y también modificaciones en el edificio (entrada y salida de agua, en el caso de la opción colgante refuerzos en la pared). Recomendamos elegir un bidé que encaje estéticamente con el inodoro. Normalmente se pueden encontrar en un set. Más cómodas son las variantes de bidé que tienen el borde más ancho En este tipo de bidé sueles sentarte de cara al grifo y debe ser cómodo. Los bordes más estrechos pueden dañar la piel de forma incómoda. Para que conste, el bidé no tiene asiento.

¿Qué hay que tener en cuenta con un bidé clásico?

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¿Cómo elegir un bidé que se mantenga solo? En primer lugar, mide bien de cuánto espacio dispones. El inodoro y bidé deben tener espacio entre ellos! El segundo aspecto de la selección es el tratamiento tecnológico y las prestaciones adicionales. Al igual que el inodoro, la taza del bidé también puede equiparse con un revestimiento protector que dificulta la acumulación de cal y acelera la eliminación de la suciedad por el desagüe. Muchos productos también pueden llevar un tratamiento antibacteriano en la superficie.

Asiento de bidé

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Una gran variante moderna es el llamado asiento de bidé. Se utilizará en lugar de un asiento convencional. La ventaja es el ahorro de espacio al mismo tiempo que amplía tus opciones de higiene El único requisito es un acceso a la fuente de alimentación en la que se enchufa el asiento. El asiento del bidé ofrece varias funciones, con las que no sólo puedes regular la intensidad y la temperatura del chorro, sino también ajustar la configuración a una persona concreta (altura, hombre/mujer...). Suele incluir función para secar las partes íntimas después de aclararlas. las funciones de autolimpieza y enjuague se dan por supuestas. A la hora de elegir, fíjate en el número de funciones, incluidas las adicionales: iluminación, secado, mando a distancia, funcionamiento ecológico, consumo eléctrico...

Bidé electrónico o inodoro con ducha

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Una opción más lujosa es el llamado inodoro electrónico (también llamado inodoro con ducha). Se trata de una verdadera combinación de inodoro y bidé en un solo producto. Gracias a la interconexión, ofrece funciones adicionales que te proporcionan una higiene intensiva. El precio más alto puede ser un problema. Sin embargo, si quieres cuidar mucho tu salud y tu higiene, no dudes en considerar esta oportunidad. Las boquillas suelen formar parte del inodoro y suelen ofrecer funciones tanto para la parte masculina como para la femenina, con la opción de ajustar el ahorro. En muchos casos también puedes ajustar la posición del asiento. Por supuesto, tiene secado con aire caliente. Apreciarás que los inodoros incorporan un sistema de supresión de olores, nada más sentarte en el asiento.  Estos productos también suelen ser joyas del diseño.

Ducha bidé

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Una alternativa barata a los bidés es la ducha de bidé, adecuada para todas las habitaciones con inodoro en las que no hay espacio suficiente o no se quiere invertir grandes sumas de dinero. Utilizar una ducha tiene sus ventajas y desventajas. En primer lugar, trabajar con una ducha es menos agradable que con un bidé clásico o variantes electrónicas, el lavado tampoco es tan eficaz y el secado está fuera de toda duda. Al mismo tiempo, hay contacto directo con la suciedad, por lo que es necesario lavar la ducha. Así que asegúrate de tener acceso al lavabo. Por cierto, las duchas bidé suelen estar unidas al lavabo.

A la hora de elegir, comprueba lo cómodo que te resulta controlar el caudal (normalmente mediante la palanca incluida con la ducha o la maneta). A continuación, fíjate en el tipo y la longitud del flexo de ducha y en si se incluye un soporte de ducha. Algunos productos ofrecen múltiples chorros. Lo ideal es que las superficies de la ducha bidé (así como la boquilla) estén tratadas con algún tipo de revestimiento protector.

TIP SANITINO: Lee también consejos sobre cómo limpiar un bidé.

 

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