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La alcachofa de ducha ha sido la solución más popular durante mucho tiempo en cuestión de higiene personal. Sus ventajas son la ligereza, la facilidad de manejo, la amplia gama de formas y diseños de superficie y su precio asequible. Si además compras una barra de ducha con soporte móvil o un soporte fijo, tendrás la mejor experiencia relajante. Si tienes niños o quieres proteger la bañera o el plato de ducha, es aconsejable optar por una ducha de mano que también tenga un anillo de protección de silicona o de otro tipo que proteja tanto el equipamiento del baño como la propia alcachofa de los daños en caso de caída.
En pocas palabras, cuanto más grande sea la alcachofa de ducha, más te rodearán los chorros de agua. Por otro lado, cuanto mayor sea el tamaño, mayor será el peso de la ducha de mano, lo que puede resultar más difícil de manipular para los niños pequeños o las personas mayores. Una buena alternativa son los cabezales de ducha con múltiples chorros de agua, que garantizan una experiencia agradable y de alta calidad.
Lo que no debes descartar es un tratamiento de superficie de calidad. Las superficies suelen tratarse con un revestimiento especial que las protege ante la acumulación de gotas de agua, suciedad y cal. Además, facilita la limpieza y conserva el aspecto perfecto durante mucho tiempo.
NUESTRO CONSEJO: Si quieres que la ducha sea divertida para tus hijos, regálales la teleducha Jocolino de Hansgrohe. Puedes elegir entre motivos de cebra, león o cocodrilo. Se cambian rápida y fácilmente y tus hijos estarán encantados.
Hay que prestar atención también a las boquillas de la alcachofa de ducha. En este caso, merece la pena comprar una que garantice un mantenimiento fácil y eficaz. Sólo así se puede asegurar un rendimiento perfecto y un funcionamiento correcto a largo plazo. El material de la boquilla elegida y la tecnología empleada desempeñan un papel importante. Son factores que permiten eliminar la cal simplemente con los dedos después de usar la ducha.
Los chorros de agua son un capítulo individual. Puedes elegir una alcachofa de ducha con un solo chorro. Una ducha de mano suele tener un chorro universal, mientras que un rociador de ducha fija te puede ofrecer un chorro relajante. Sin embargo, si quieres darte un auténtico capricho, elige una opción que te ofrezca chorros múltiples.
La combinación más común de chorros es:
A la hora de elegir la alcachofa de ducha, la forma del mango es muy importante. Los fabricantes de primera calidad piensan en la practicidad y en tu comodidad y fabrican mangos que son estéticamente atractivos y ergonómicos. Son muy fáciles de sostener en la mano y están perfectamente equilibrados. El sistema de cambio entre chorros también tiene su importancia. La forma clásica es girar la parte con las boquillas.
La forma moderna es un botón especial en el centro de la alcachofa de ducha o un botón en el mango. De este modo, la ducha se puede manejar suavemente con una sola mano. Otra ventaja es el colador incorporado, que recoge la suciedad de la tubería de agua. Tu seguridad está garantizada por una tecnología especial que asegura que las superficies de la alcachofa nunca estén demasiado calientes.
Es importante recordar que tanto la sensación de las gotas que caen sobre nuestro cuerpo como el aspecto visual del baño contribuyen a la relajación absoluta. Un espacio diseñado de forma estética y armoniosa puede relajar nuestra mente y sumirnos en una profunda relajación. Las alcachofas de ducha destacan por sus formas agradables y atemporales. A continuación, depende de ti si eliges líneas angulares, líneas redondeadas, una combinación de ambas o un estilo retro. Puedes elegir entre muchos colores, como el clásico cromo o el blanco, el negro, el latón, el acero inoxidable, el mate, el brillante y diversas variaciones y combinaciones de colores.
El caudal de agua de una alcachofa de ducha normal que no está equipada con un modo de ahorro de agua suele ser de 12 a 18 litros por minuto. Las estadísticas muestran que cada persona utiliza hasta 12.000 litros de agua al año, lo que puede suponer un alto coste, especialmente para los hogares con más personas. Por eso, es recomendable buscar productos con características ecológicas, en los que el consumo de agua pueda reducirse a menos de 6 litros por minuto. Las tecnologías modernas garantizan un importante ahorro de agua manteniendo una presión de agua suficiente.
A la hora de elegir una alcachofa de ducha, no tienes que centrarte sólo en la ducha de mano conectada al grifo con una manguera de ducha. También puedes elegir un rociador de ducha que se fije al techo o a la pared. Los rociadores suelen ser más grandes, por lo que proporcionan una experiencia más intensa.
Puedes elegir entre uno o varios chorros, entre los que puedes cambiar, normalmente mediante un botón en la ducha, o directamente en el grifo. Una opción especial es la columna o panel de ducha, que suele estar enriquecido con chorros de masaje laterales. El resultado es un elemento de baño de diseño interesante que está coordinado funcional y estéticamente hasta el más mínimo detalle. Normalmente se incluye una ducha de mano.